Muchas veces elegimos dormir 5 minutos más antes que desayunar en casa, y luego lo hacemos en la oficina con snacks o alimentos rápidos pero poco saludables, que no nos aportan energía.
Como ya sabemos, el desayuno es la comida más importante del día, y para lograr que éste sea bueno y sano, debe incluir fruta. Y hay muchos motivos que lo justifican.
Incluir la fruta en el desayuno es empezar el día con mucha energía, acompañando tu té o café habitual con alimentos sanos desde el primer momento.
Entre las 7 y las 10 de la mañana, nuestro cuerpo pasa por un proceso denominado detoxificación, en el que se eliminan todas las toxinas acumuladas del día anterior, y la fruta le da a tu cuerpo las energías que necesita para hacer este proceso.
Comer la fruta de desayuno antes de consumir cualquier otro alimento hace que ésta vaya a parar directamente al intestino delgado en lugar de quedarse en el estómago, tomando los mejores nutrientes para tu organismo. Además la fruta contiene glucosa, que es el combustible del cerebro y si nos acostumbramos a consumirla cada mañana, puede tener un efecto activador como el del café.
Hay muchas formas posibles de comer fruta. Puedes comer las piezas solas, realizar una ensaladas con tus favoritas o consumirlos en licuados igual de nutritivos!